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En el mundo del CBD, casi todos los meses se descubren nuevos cannabinoides. Entre los que se encuentran entre el centenar que puede producir la planta y que aún no han sido catalogados, y los que se crean desde cero o simplemente se "mejoran" químicamente, realmente no hay tiempo para aburrirse.
Hoy nos gustaría presentarte el CB9, a veces llamado erróneamente CBG9. Se trata de un cannabinoide presente de forma natural en el cáñamo. CB9 es la abreviatura de Cannabinoide 9, y muchos aspectos de este cannabinoide siguen siendo bastante misteriosos. Especialmente aquellos aspectos que conciernen a su descubrimiento y síntesis por el cáñamo.
No te muevas, ¡te lo explicamos todo con detalle!
A primera vista, parece bastante diferente de los otros cannabinoides que se encuentran en el cannabis o en las flores y resinas de CBD.
Parece que fue descubierto por casualidad durante un análisis de destilado de CBD, por quién sabe qué laboratorio. Este descubrimiento fue un poco fortuito, ya que parece que este cannabinoide con propiedades extraordinarias no puede ser detectado por los métodos convencionales comúnmente utilizados, como la cromatografía líquida de alto rendimiento (HPLC). Esta propiedad explica que su descubrimiento sea tan reciente.
Su síntesis por el cáñamo también es interesante: no está claro cómo el cáñamo consigue crear este compuesto. Algunos resultados sugieren que seproduce mediante una compleja reacción química en la que intervienen varios otros cannabinoides, como los más conocidos CBD y THC, pero esto sigue siendo bastante vago.
Como probablemente te imaginarás, aunque está presente de forma natural en el cáñamo, el CB9 que encontramos en algunas tiendas electrónicas se sintetiza en el laboratorio, ya que en su estado natural sólo representa una concentración mínima. Por lo tanto, el CB9 que encontrarás será un cannabinoide semisintético.
La estructura molecular del CB9 es algo similar a la del CBD. Tiene la misma cadena de carbono de 5 átomos, pero también hay una serie de diferencias.
Una estructura molecular diferente significa efectos diferentes. Y en este caso concreto, esta afirmación funciona especialmente bien, porque aunque está bastante cerca del CBD, los efectos del CB9 parecen estar más cerca de los del HHC.
Según diversas fuentes de información, parece ser capaz de interactuar con los receptores CB1 y CB2, produciendo un subidón bastante similar al del HHC: suave, que induce euforia, relajación y un cambio en la percepción. Algunas fuentes también mencionan un aumento de la energía y la creatividad.
Aún no hemos podido comprobar estos efectos por nosotros mismos, y la investigación sobre el tema es aún muy escasa, por lo que los efectos son más supuestos que reales y deben tomarse con cautela.
Al igual que los demás miembros de la familia de los cannabinoides, el CB9 influye en los receptores CB1 y CB2, que a su vez intervienen en varios sistemas metabólicos. En particular, desempeñan un papel en :
Al influir en estos sistemas, potencialmente podría tener un efecto beneficioso sobre ellos, pero pasará algún tiempo antes de que se detecte, reconozca y explique cualquier acción.
El CBG9 tiene una rara propiedad específica que podría hacerle merecedor de un lugar entre los nuevos cannabinoides: no cristaliza. Esto significa que incluso en altas concentraciones, como en un aislado de más del 90%, permanece en forma líquida, a diferencia del CBD y de la gran mayoría de cannabinoides.
¿Cuál es la diferencia? Como explicamos en el artículo dedicado al CRD ("destilado resistente a los cristales" en francés.) donde tratamos el tema con más detalle, esta particularidad permite utilizar su aislado en vape o aceite, sin problemas de estabilidad. Por lo tanto, podría utilizarse en la composición de productos de amplio espectro y desempeñar un papel en el efecto séquito, que multiplica los efectos de cada compuesto presente.
Como la mayoría de los neocannabinoides del mercado francés, el CB9 es legal siempre que la autoridad responsable de la seguridad de los productos, la Ansm, no haya detectado ninguna acción nociva o adictiva en el producto.
Lo mismo ocurre en otros países europeos como España, Alemania e Italia. Pero su condición de cannabinoide sintético la prohíbe automáticamente en suelo suizo o danés, por lo que si quieres viajar con CB9 en el bolsillo, te aconsejamos que prestes mucha atención a la legislación vigente en el país de destino.
Este inusual nuevo cannabinoide representa por sí solo una serie de avances potenciales en el mundo del CBD.
En primer lugar, porque no es detectable por métodos convencionales, lo que potencialmente significa que no es el único cannabinoide presente que simplemente no podíamos descubrir hasta ahora.
En segundo lugar, porque su resistencia a la cristalización podría ser una gran ventaja para ella y para los fabricantes, que podrían explotarla para crear nuevas gamas de aceites y e-líquidos con efectos calmantes y embriagadores.
Y por último, porque como todos los cannabinoides, podría resultar extremadamente útil en el tratamiento de pacientes cuyas enfermedades no responden adecuadamente a los tratamientos convencionales, o que sufren de estrés y ansiedad y buscan un suplemento dietético que les ayude a encontrar su equilibrio.
Sea como fuere, y como ocurre con muchos otros cannabinoides menores,la investigación sigue su curso y probablemente tendremos que esperar mucho tiempo antes de tener más respuestas a nuestras preguntas, ¡porque la lista de espera se está haciendo larga!